martes, 24 de marzo de 2009

Mi madre y la psicohistoria

Esta tarde al llegar a casa me he encontrado en la cocina un un post-it con una dirección de internet. La dirección me ha parecido familiar a otra que conozco, y por curiosidad, me he ido a ver qué salía en la página.

No existía, lo que, conociendo a mi madre, es un punto a favor de la "familiaridad". Así que decido que en cuanto llegue, le pregunto sobre el tema.

Cuando llega, y le pregunto, me dice que ha oído en la radio que es la página de una empresa de unos "chicos" de la universidad... bueno, matemáticos... que se dedica a simular la vida, y así saber lo que le va a pasar a la gente en el futuro...

Vamos, casi, casi, lo que viene siendo la psicohistoria de Hari Seldon (el de Asimov de toda la vida), sólo que a un nivel individualizado.

Como conozco a mi madre, y sé de qué pie cojea, con lo que me ha contado, enseguida confirmo que mi intuición era buena: la empresa a la que se refiere es la que me imaginaba, en la que trabajan unos amigos bioquímicos, y lo que simulan son entornos celulares para la optimización de procesos bio-productivos y cosas por el estilo.

Y desde luego, nada de saber qué le va a pasar a nadie en el futuro (a no ser que seas una bacteria que viva en un entorno controlado y te metan nutrientes por un tubo para que produzcas cualquiera sabe qué).

Para mi desgracia, a cosas como éstas estoy acostumbrado: tengo asumido que mi madre es una "analfabeta científica" (y que en demasiadas ocasiones, como esta, lo suple con demasiada fantasía)... pero lo que me sigue reventando es que me siga llevando la contraria y discutiendo las cosas porque "lo han dicho en la radio/tele/revistas" (total, yo sólo soy ingeniero, qué voy a saber de nada...).

Hasta le he ofrecido intentar ponerla en contacto con el director de la empresa para que él mismo le explique a qué se dedican... pero no, "en la radio han dicho que...". Cualquiera le saca la idea de la cabeza. Seguro que al final acaba visitando la página, y sigue sin convencerse de que no tiene nada que ver con lo que ella se ha imaginado.

sábado, 21 de marzo de 2009